EL PECADO NO ES SER POBRE, ES NO HACER NADA PARA DEJELO DE SER

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“Ganar nos ha hecho perder el miedo, hoy somos mejores”


Seis alumnos del colegio Santa Rosa de Sullana, con la web 'Machu Picchu para el mundo’ (www.educared.net/Concurso2010/1184/), ganaron el concurso convocado por la Fundación Telefónica en 19 países del mundo. Conversamos con Jonathan Salazar Aguilar, su profesor y asesor. Autor: Gonzalo Pajares C.

CompartirEnviar.“Me gustan las letras y los números. Me gusta la investigación: analizar, implementar, desarrollar nuevos conocimientos. Y, sobre todo, me gusta compartir estos conocimientos. Por eso, a pesar de ser ingeniero informático, me dedico a la docencia”, nos dice Jonathan Salazar Aguilar, profesor sullanense quien, junto con sus alumnos del colegio Santa Rosa, desarrolló una web sobre Machu Picchu que es considerada la mejor en el ciberespacio.

¿POR QUÉ NO SIGUIÓ CON LA INGENIERÍA?

Hasta el año pasado me dedicaba a ella. La dejé porque quería aportar mis conocimientos a la educación. He tenido buenos trabajos –estuve en Caja Sullana, trabajé para Relaciones Exteriores y en algunas empresas privadas–, pero decidí sacrificar algo de la parte económica, porque no es verdad que sea lo más importante. Yo aprecio más el compartir con los demás. Esto no significa que uno abandone su carrera o su vocación: yo sigo desarrollando mis proyectos de informática.

¿POR QUÉ SE QUEDÓ A TRABAJAR EN SULLANA?

Estuve trabajando en Lima, pero hay que estar donde el trabajo se presente y donde uno siente que aporta para beneficio de la sociedad, no solo a nivel personal. El año pasado trabajé en Talara y, al terminar mi contrato, fui convocado por los promotores del colegio Santa Rosa. Asumí su propuesta como un reto. Además, me permitía regresar a Sullana y estar con mi familia.

ENTONCES, NO FUE UN RETROCESO…

Para nada. ¿Por qué pensar que hay que ir al exterior para surgir, cuando acá se puede salir adelante? No tengo complejos de inferioridad ni creo que los profesionales de fuera son mejores que yo. Hoy competimos en un mundo globalizado, y me actualizo siempre, quien no lo hace está perdido. Por ejemplo, ¿qué es el DOS? (Risas).

ADEMÁS DE DICTAR, ¿QUÉ HACE EN EL SANTA ROSA?

Además de dictar 35 horas de clases tengo a mi cargo el área de Sistemas y manejo el software del colegio. Sí, sí, me están pagando bien, no en vano fui un alumno muy bueno, siempre por encima del tercio superior (ríe).

¿CÓMO DESARROLLÓ SU CREATIVIDAD?

Siempre he sido creativo. También me gusta dibujar, gané varios concursos en la escuela. Más que artista, soy curioso, por eso no se me hace difícil meterme a varias cosas y desarrollarlas con eficiencia.

¿CÓMO NACIÓ LA WEB DE MACHU PICCHU?

Nuestro equipo estuvo conformado por seis alumnos de secundaria: uno de cuarto y cinco de quinto. Alumnos y profesores nos reunimos y empezamos haciendo una lluvia de ideas, las planteamos y nos dimos cuenta de que Machu Picchu no tenía una web a su altura, las que existían eran muy pobres en su contenido multimedia, en la información… hasta la web de Promperú es deficiente.

¿CUÁL ES EL PLUS DE SU WEB?

Lo que hicimos fue agrupar la información dispersa, ordenarla, jerarquizarla, sintetizarla y ponerla en nuestra web, de tal manera que el usuario no esté yéndose de un lado a otro. ¿Fuimos a Machu Picchu? No, la información la encontramos en Internet y en la biblioteca de Sullana. No es broma. El trabajo fue arduo –le robamos tiempo a nuestras vidas, a nuestras familias–, científico; y el soporte técnico, importante. Y todo fue realizado por los alumnos, yo solo he sido el profesor, el guía. Es más, algunos de estos chicos se están dedicando a desarrollar webs.

¿QUÉ REPRESENTA PARA USTED Y SUS ALUMNOS HABERLES GANADO A 8,219 PERSONAS, A 2,169 EQUIPOS DE 19 PAÍSES?

Es una inmensa satisfacción, porque nuestra primera lección es que, con esfuerzo, las cosas se consiguen. Además, es un ejemplo para los alumnos que vienen. Ya estoy preparando a varios grupos para este y otros concursos, y siento que hemos perdido el miedo a competir, pues hoy nos sentimos mejores. Sin embargo, el premio lo hemos recibido con humildad. Con pocos recursos –una computadora y una conexión a Internet– se puede hacer mucho si hay esfuerzo y dedicación.

¿CÓMO SE SIENTE?

Lo que le dije al inicio: no importa la profesión que uno tenga, pues siempre se puede estar al servicio de los demás; no importa cuánto dinero uno gane, sino cuánto bien se hace a los demás